Estos limónes son un ingrediente de la
cocina tradicional marroquí. Dan un sabor cítrico, aromático,
especiado, también fresco y ácido.
Para
preparar no se necesitan muchas cosas pero si un poco de paciencia,
porque estos limónes tienen que macerarse durante 4 semanas. La
maceración produce un cambio ablandando la cáscara de los limones y
trasformando el sabor amargo, en un sabor y un aroma magnífico.
Se convierten en un gran aliado en vuestra cocina, son
increíblemente versátiles y perfectos para dar un toque especial a
cualquier plato sea carne, pollo, pescado, verdura ... Un simple
couscous se transforma en algo mucho más exótico. Hay muchas
versiones pero creo que esta funciona muy bien. Una cosa importante;
antes de utilizarlos lavamos toda la sal que hay dentro de los
limones tiramos la pulpa y solo utilizamos la cáscara cortando en tiras o trozos pequeños.
Ingredientes:
10-12 limones ecológicos
300g sal gruesa
3 hojas de laurel fresco
1 cucharita de semillas de cilantro
1 cucharita semillas de pimienta negra
1-2 ramitas de canela
zumo de limón suficiente para
1 tarro de cristal con tapa hermética con capacidad de 2L
Esterilizamos el tarro de cristal.
Lavamos bien los limones. Cortamos en cuatro desde la parte
superior pero sin separar los cuartos.
Cubrimos el fondo del tarro con ¼ de la sal, rellenamos cada
limón con bastante sal y apretamos tratando de darles su forma
nuevamente. Introducimos los limones en el frasco de manera que te
queden bien apretados. Añadimos todas las especias, cubrimos con la
sal restante y llenamos el frasco hasta el borde con jugo de limón
(a la mejor tenéis que exprimir más limones) y cerramos el tarro.
Conservamos en la nevera durante 4 semanas. Agitamos de vez en
cuando durante este periodo.