A todos nos gusta mimar el
alma.
Taparnos con nuestra manta
más suave, ver nuestra película preferida, escuchar música o meternos en la
cocina y hacer algo rico.
Me suele ocurrir, que
cuando tengo algún disgusto, me refugio en la cocina sin saber exactamente lo
que quiero hacer. Ayer fue uno de esos días…, pero al final, las aguas
volvieron a su cauce.
No sé si sabréis que el
olor de la canela, reduce la fatiga y el estrés, y se dice que envuelve de
armonía a las personas. Creo que su olor puede relacionarse con el amor y la
alegría. Es imposible de olvidar. ¿Quién no tiene un recuerdo asociado a su
madre o a su abuela preparando algo dulce con canela? Seguro que todos…
Ahora yo me baso en esas
recetas, y lo único que modifico es su aspecto final.
Lo que es digno de ver es la cara de mis hijos
comprobando el resultado. ¡Eso no tiene precio!
Ingredientes:
· 550 gr. de harina tamizada.
· 90 gr. de azúcar glas.
· 1 cucharada de azúcar blanco.
· 70 gr. de mantequilla.
· 2 yemas de huevo.
· 400-500 ml. de leche.
· 25 gr. de levadura fresca.
· Pizca de sal.
Para el relleno:
· 150 gr. de mantequilla.
· 220 gr. de azúcar moreno.
· 2 ½ cucharaditas de
canela.
Elaboración:
Mezclamos 100 ml. de leche
con la cucharada de azúcar blanco, añadimos la levadura, tapamos y dejamos
fermentar. Tamizamos la harina y el
azúcar glas.Derretimos la mantequilla.
En un bol, ponemos todos
los ingredientes, vamos vertiendo la leche poco a poco,
mientras amasamos,
hasta empiece adespegarse de las manos. La
masa tiene que quedar firme, pero a la vez blanda. Formamos una bola y tapamos
con un paño limpio. Dejamos reposar 45 min.
Precalentamos el horno a
200ºC.
Preparamos el relleno:
derretimos la mantequilla, cuidando de que no hierva,
y le añadimos el azúcar y
la canela, mezclándolo todo. Dividimos la masa en dos
mitades.
En una superficie
enharinada, estiramos una de las dos porciones en forma rectangular, de ½ cm.
de ancho aproximadamente. Extendemos la mitad del relleno por su superficie,
enrollamos y la ponemos en un molde redondo o bundt cake, previamente engrasado
y levemente enharinado. Repetimos el mismo procedimiento con la segunda
porción, procurando que tenga el mismo grosor que la primera, y la colocamos en
el molde, encima de la otra.Metemos nuestro pastel en
el horno, y transcurridos de 10
a 15 min. Reducimos la temperatura a 180º. Horneamos una
hora aproximadamente, o cuando comprobemos que esté hecho.
Si se dora demasiado, lo
tapamos con papel de aluminio.Diez minutos antes de
sacarlo del horno, pincelamos con un poco de leche por encima. De esa forma la
masa queda más suave.
Dejamos enfriar, y
espolvoreamos con un poco de azúcar glas.
d
n No olvidéis ATELIER en octubre!!!! - lemon curd, mermelada de vainilla y membrillo, chutney de melocoton y pimienta ...
v